La intermitencia es uno de los problemas de la mayor parte de las energÃas renovables, incluida la marina: a veces abunda, otras veces escasea. De ahà que, para gestionar adecuadamente la energÃa del mar e integrarla en la red eléctrica, convenga saber cuándo traerán suficiente fuerza las olas. Y eso es precisamente lo que ha hecho el grupo Eolo, de la Universidad del PaÃs Vasco (UPV/EHU).
Pese al problema de la intermitencia, la energÃa de las olas tiene una ventaja con respecto, por ejemplo, a la eólica: es más fácil predecir un oleaje óptimo que unas ráfagas de viento apropiadas, señala la UPV en su página web, en la que informa del trabajo desarrollado por el grupo Eolo. Por eso, tan importante como contar con prototipos eficientes para el aprovechamiento de la energÃa undimotriz es saber cuánta energÃa traerán las olas dentro de unas horas. Conociendo dicho dato, se puede insertar mejor la energÃa producida por las olas en la red eléctrica, y, de paso, aumentar el consumo de energÃa renovable.
El grupo Eolo ha desarrollado varios modelos de predicción de la cantidad de energÃa undimotriz para el golfo de Bizkaia, utilizando para ello la técnica denominada random forests (bosques aleatorios). Random forests (RF) es un algoritmo desarrollado durante los últimos años en el campo del Machine learning. La base de los RF son los llamados árboles de regresión, en los que las variables de entrada se consideran raÃces y los de salida, hojas. De ahà la denominación árbol. El random forest es un desarrollo de los árboles de regresión que, en lugar de un solo árbol, utiliza muchos (por lo general, más de mil), formando un bosque o selva, aclara Gabriel Ibarra, del grupo Eolo.
Según el citado investigador, los modelos desarrollados por su grupo son más fiables que otros ya existentes para las predicciones a tres-dieciséis horas vista. Los modelos de Eolo están basados en una serie histórica de mediciones que comparan entre sà los niveles de energÃa de las olas en un momento dado y los que se prevén para dentro de algunas horas. La medición se realiza mediante boyas, de las que cinco están instaladas en el golfo de Bizkaia, tres cerca de la costa gallega y dos en mar abierto. El organismo Puertos del Estado se encarga del mantenimiento de las boyas instaladas en Galicia, y el servicio meteorológico británico (MetOffice) de las de mar abierto.
Dos son las prioridades del grupo Eolo de cara al futuro: por una parte, acceder en tiempo real a los datos del modelo meteorológico WRF (Weather Research and Forecasting), que le servirán para mejorar los resultados actuales; por otra, continuar investigando los escenarios climáticos que puedan producirse en el futuro. Y es que el cambio climático afecta también al oleaje, asà como a los temporales que, con cierta frecuencia, azotan la costa vasca.
En opinión de los miembros de Eolo, es importante saber qué evolución tendrá la energÃa marina las próximas décadas. Ese es, precisamente, el eje de su esfuerzo investigador. En cualquier caso, las investigaciones sobre la predicción de la energÃa de las olas no han hecho más que comenzar, y no han llegado todavÃa a la fase operativa, es decir, no se aplican directamente.
En el PaÃs Vasco se encuentra una de estas instalaciones, la central de Mutriku, inaugurada en 2011. Funciona con tecnologÃa OWC, y envÃa a la red eléctrica la energÃa que produce. Por otra parte, la plataforma BIMEP (Biscay Marine Energy Platform), dependiente del Ente Vasco de la EnergÃa (EVE), creará en breve una plataforma de ensayos para probar prototipos con actividad de olas real.