América Latina y el Caribe podrÃan disminuir su dependencia de los combustibles fósiles si apostasen por una energÃa que nace del interior de la Tierra y que demuestra su poder con los temblores y las erupciones volcánicas: la energÃa geotérmica.
Un estudio ha revelado que siete islas del Caribe Oriental tienen un enorme potencial para la generación de energÃa geotérmica: la isla mexicana de Guadalupe, la isla británica asociada de Dominica, la isla británica de Montserrat y las islas Estado de San Vicente, de Granada, de Santa LucÃa y de San Cristóbal y Nieves.
En la isla de Guadalupe, por ejemplo, ya se han desarrollado recursos geotérmicos con la planta eléctrica La Bouillante, que genera 15 Megavatios (MW), lo suficiente como para satisfacer las necesidades de 64.000 hogares. Los recursos en esa región continúan inexplorados, pero los expertos sugieren que el potencial comercialmente explotable podrÃa alcanzar los 850 MW.
Una vez desarrollada, esta energÃa podrÃa ofrecer a las islas una fuente limpia, económica y menos vulnerable a circunstancias como el cambio climático. También servirÃa para ofrecer un suministro energético de confianza a un precio estable, en una de las regiones que se enfrenta mensualmente a una de las facturas de luz más caras del mundo.
La energÃa fruto de las erupciones volcánicas y los terremotos ya se utiliza con éxito en lugares como Indonesia, aunque también parece ser una alternativa viable en México y Nicaragua, donde ya se aprovecha el vapor de los géiseres para generar electricidad.
La energÃa geotérmica se considera una fuente de energÃa renovable que aprovecha el calor que se genera en el subsuelo del planeta. Los recursos geotérmicos de mayor temperatura, de más de 100-150 grados centÃgrados, se utilizan para generar energÃa eléctrica, por eso, la energÃa que se libera en terremotos y volcanes puede ser muy útil para satisfacer la demanda creciente de electricidad.
Una de las ventajas de esta energÃa es que es muy respetuosa con el medio ambiente, ya que no produce prácticamente residuos. Además, tiene un coste de producción menor que el de las plantas de carbón y minimiza la dependencia energética.
Aunque es verdad que no todos los paÃses cuentan con yacimientos suficientes para evitar la dependencia energética del exterior, la región del Caribe tiene capacidad suficiente para reducir su dependencia. Además, es una energÃa perfecta en generación de calor para uso residencial,ya que basta con disponer de una bomba de calor e instalar el intercambiador de calor en el subsuelo.
Sin embargo, no todo es positivo en la energÃa geotérmica. A diferencia de los yacimientos petrolÃferos, que se pueden detectar antes de perforar la Tierra, la única forma de determinar si se liberará energÃa geotérmica es taladrando la corteza terrestre.
Los gastos asociados a esta energÃa son siempre por adelantado. La construcción de una central geotérmica de 10MW cuesta alrededor de 60-70 millones de dólares, una cuantiosa inversión inicial que está mucho más allá del alcance de las endeudadas economÃas caribeñas.
Aunque desde el punto de vista del consumidor, esto allana el camino hacia la estabilidad de precios energéticos, ya que solo hay que amortizar la inversión inicial y no se producen más gastos variables.